HMS Queen Elizabeth ha navegado desde la Base Naval de
Portsmouth por primera vez desde que llegó a su puerto de origen para un
mantenimiento planificado en agosto. El futuro buque insignia de la Marina Real se ha
embarcado en la próxima serie de pruebas en el mar para probar la capacidad de
la nave de 3.000 millones de libras esterlinas. Se espera que el HMS Queen
Elizabeth esté en el mar durante el próximo mes y será entregado a la Royal Navy antes de fin
de año.
Su primera fase de ensayos en el mar, realizada a
principios de este año, demostró la estabilidad y la maniobrabilidad de la
plataforma. El portaaviones de 65,000 toneladas es el buque de guerra más
grande y avanzado que haya sido construido por la Royal Navy y puede
acomodar hasta 1,600 personas, lo que incluiría una tripulación aérea completa,
pero también proporciona espacio para personal embarcado como Royal Marines.
El diseño, construcción y desarrollo de la Clase Queen Elizabeth
ha sido un verdadero esfuerzo nacional, que involucra a todas las regiones del
Reino Unido. Los astilleros en seis ciudades del Reino Unido han construido
secciones de los portaaviones y, aunque muchas partes llegaron a Rosyth por
carretera, las principales secciones debían transportarse en barcaza por la
costa del Reino Unido.
El HMS Prince of Wales, el segundo de los nuevos
portaaviones de la flota, se encuentra en las fases finales de construcción en
Rosyth Dockyard y se espera que salga de su muelle gigante la próxima
primavera. Hasta la fecha, la construcción de los dos barcos ha devorado 51
millones de horas hombre, lo suficiente para mantener a una persona ocupada
durante más de 5.800 años. (Source/Photo: Royal Navy)
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