Para la aviación de la Marina , un resurgimiento de los episodios de
hipoxia en aviones de combate ha hecho un año difícil - un hecho subrayado en
julio, cuando un escuadrón F/A-18 Hornet desplegado a bordo del portaaviones
USS George H.W. Bush en apoyo de la lucha contra ISIS suspendió las operaciones
durante una semana entera después de que los pilotos experimentaron problemas
en los días consecutivos.
Pero ese paso, una respuesta dramática a lo que la Marina ha llamado su
preocupación de la aviación No. 1, también puede ser un signo de cambio
cultural positivo, dijo el capitán Dave "DW" Kindley, gerente de la Oficina del programa F/A-18 Hornet y EA -18G Growler.
Durante una entrevista en el Pentágono con respecto al
esfuerzo del servicio para resolver lo que llama "episodios
fisiológicos", Kindley elogió el liderazgo a bordo del portaaviones que no
permitió despegue del Escuadrón de Caza y Ataque 37, incluso en un ocupado
ambiente operativo.
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