Botswana ha incluido al sector de defensa y seguridad como
una de las cinco áreas prioritarias de gasto que compartirán la mayor parte del
presupuesto 2018/19, dijo un alto funcionario. El país está buscando una
variedad de hardware militar, desde los botes inflables a los aviones de
combate. En una hoja de estimación de gastos presentada en un seminario
pre-presupuestario que examinó las prioridades del gobierno para el año fiscal
2018/2019 a partir de marzo de 2018, el ministro de Finanzas y Desarrollo
Económico Kenneth Matambo dijo que el sector de seguridad recibirá más para
financiar la modernización de equipos para mejorar la seguridad nacional.
El dinero se gastará en la modernización del equipo, la
capacitación y la construcción de más facilidades de seguridad y alojamiento
para la policía. Se espera que la
Fuerza de Defensa de Botswana (BDF) continúe con la
adquisición de nuevos equipos, específicamente aviones de combate,
helicópteros, sistemas de defensa aérea, tanques y vehículos blindados de
transporte de personal.
El año pasado se asignó a la BDF 1,35 mil millones de
dólares para el Plan Nacional de Desarrollo 11, que va de 2017 a 2023. Botswana busca
adquirir aviones de combate y ha manifestado su interés en una docena de Saab
Gripens o FA-50 de Korea Aerospace Industries. La adquisición de aviones de
combate es la última en el esfuerzo de modernización de defensa del país. Por
ejemplo, Botswana compró 304,2 millones de euros de material militar de Francia
en 2016, incluidos los misiles MICA-VL y Mistral.
Otras adquisiciones incluyen un acuerdo de 179 millones
para 45 vehículos blindados Piranha 3 de la compañía suiza GDELS-Mowag. El BDF
está buscando adquirir diez botes inflables y diez remolques en un período de
tres años. En un documento de licitación fechado en agosto, el Comité de
Licitación Ministerial dijo que estaba buscando "la provisión y entrega de
botes inflables a BDF". El documento prevé el suministro de 7 x 2,5 metros "tour
boat" y 5 x 2,5
metros "casco clásico" barcos, impulsado por
motores de 850 hp de inyección de combustible. Deben ser de color verde militar
y llevar a aproximadamente diez personas. Además, el Servicio de Policía de
Botswana (BPS) ha pedido siete vehículos especializados de control de disturbios
de un fabricante sudafricano.
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